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El mundo de los auriculares es muy completo y cada vez podemos encontrar dispositivos más modernos y envolventes, como es el caso de los auriculares 5.1 y los auriculares 7.1, que cuentan con sonido virtual y replican la sensación de tener varios altavoces incorporados que un mismo dispositivo. Los auriculares pueden ser de muchos tipos diferentes, dependiendo de cómo se clasifiquen, de sus características y de sus funciones. En este artículo vamos a explicarte en qué consisten exactamente los auriculares abiertos, qué tipos podemos encontrar y otras cuestiones que te resultarán de gran interés. ¡Sigue leyendo!
Los auriculares abiertos son auriculares que están diseñados para no aislar acústicamente al usuario del exterior. El motivo de ello es poder experimentar la escucha de forma más natural, ya que el sonido de la pista se mezcla ligeramente con el entorno —tal como lo haría el oído al escuchar la grabación de la pista en vivo—. Este tipo de auriculares, a diferencia de otros muchos auriculares —independientemente de que sean de diadema o in-ear—, son muy ligeros y cómodos, esto se debe a que la presión que se ejerce sobre nuestros oídos y cabeza es relativamente suave, ya que no buscan el aislamiento que ofrecen otros auriculares. Por este mismo motivo, los auriculares de diadema abiertos son una de las mejores opciones cuando vamos a utilizarlos en la calle —principalmente, porque aportan confort, pero también seguridad, ya que nos permitirán enterarnos de cualquier imprevisto a nuestro alrededor—.
Los auriculares de diadema abiertos son muy recomendados también cuando vamos a hacer uso de ellos durante largos periodos de tiempo, ya que apenas notaremos que los llevamos. Ahora bien, la falta de aislamiento acústico afecta de manera bidireccional —es decir, podemos escuchar el exterior, pero también pueden escucharse las pistas que estamos reproduciendo—, por este motivo no son muy recomendados para su uso en espacios silenciosos como bibliotecas. Por supuesto, los auriculares abiertos ofrecen una mayor fidelidad que los auriculares de consumo.
Los auriculares pueden ser de varios tipos, según la forma en la que se clasifiquen. Lo más habitual es clasificarlos según su forma, su conexión y sus funciones —además, estos pueden ser abiertos, semiabiertos o cerrados, como vemos más abajo—:
Dependiendo de la forma de los auriculares, estos pueden ser de dos tipos:
-Auriculares de diadema: Los auriculares de diadema son los de toda la vida, es decir, los que se colocan sobre la cabeza. Dentro de esta clasificación podemos encontrar también auriculares circumaurales, que son más grandes y rodean la oreja, y los auriculares supraurales, que son más pequeños y van sobre la oreja.
-Auriculares in ear: También son denominados como audífonos o IEMs —in ear monitors—. Estos auriculares son una evolución de los prácticamente extinguidos auriculares de botón.
Dependiendo de la conexión de los auriculares podemos distinguir dos tipos:
-Auriculares con cable: Los auriculares con cable pueden contar con un cable estéreo normal (SE, Single Ended) o un cable balanceado para DACs y reproductores con este tipo de salidas.
-Auriculares inalámbricos: Estos funcionan mediante tecnología bluetooth o radiofrecuencia. Los de última generación, en este tipo de clasificación, son los auriculares True Wireless —sin cables entre el canal derecho y el izquierdo para transmitir las señales entre sí—.
Dependiendo de la función o el uso, la clasificación de los tipos de auriculares puede ampliarse de la siguiente forma:
-Auriculares con micrófono: Es muy común encontrar un micrófono en los auriculares in ear tradicionales, igual que en los auriculares abiertos con micrófono del tipo diadema.
-Auriculares gaming: Suelen contar con una gran cantidad de funciones, además de incluir micrófono. Por ejemplo, pueden regular el volumen o ponerse en mute y ofrecen una excelente calidad.
-Auriculares deportivos: Son auriculares diseñados especialmente para hacer deporte, lo que implica que tienen una gran sujeción, resisten perfectamente la humedad a causa del sudor y funcionan con bluetooth.
-Auriculares con cancelación del sonido activa: Están diseñados con sistemas electrónicos que permiten cancelar el ruido, además de ofrecer un excelente aislamiento.
-Auriculares DJ: Son un tipo de auriculares de diadema cerrados. Por lo general cuentan con uno de los brazos móviles para poder liberar uno de los oídos. Ofrecen un excelente aislamiento y calidad. Se trata de auriculares profesionales.
Ahora que ya sabes qué tipos de auriculares hay, vamos a responder a uno de los interrogantes más habituales entre los usuarios que quieren adquirir unos auriculares. Te explicamos cuál es la diferencia entre auriculares abiertos o cerrados y los semiabiertos —independientemente de que sean auriculares de diadema cerrados o abiertos o in ear—.
Como hemos visto más arriba, los auriculares abiertos —como es el caso de los auriculares de diadema abiertos— son dispositivos que no ofrecen un aislamiento del sonido. Esto supone una gran cantidad de ventajas, puesto que mejoran la seguridad al poder estar más atentos del exterior, además de ser más cómodos —ya que apenas aprietan— y disfrutar de un sonido más natural —mezclado con el entorno—. Ahora bien, como contraposición nos encontramos que este tipo de auriculares raramente dan al oyente la sensación de escuchar unos poderosos y profundos graves.
Los auriculares cerrados están diseñados específicamente para aislar el sonido. Esto es posible gracias a los materiales utilizados que evitan que las ondas se disipen en otra dirección que no sea la del propio oído. Se trata de auriculares que ejercen una mayor presión sobre la cabeza, pero con una respuesta excepcional a las frecuencias graves. Son ideales para escuchar los matices sonoros en cualquier pista de audio y para trabajar con sonido de manera profesional —por ejemplo, en un estudio de grabación, para técnicos de sonido, periodistas…—.
Los auriculares semiabiertos son un punto intermedio entre los cerrados y los abiertos. Estos proporcionan un gran confort gracias a su diseño y mejoran la calidad de los graves. Estos últimos suelen evitar la filtración de sonidos de alta frecuencia, aunque ofrecen una menor resistencia a la salida de frecuencias graves. Ten en cuenta que estas últimas cuentan con una longitud de onda más larga, por lo que son más difíciles de contener.