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Los auriculares cerrados son los grandes aliados de los audiófilos en movimiento por los beneficios de su diseño, capaz de aislar el ruido de forma pasiva gracias a la forma y construcción de sus copas. Además, son el tipo de auricular recomendado para los usuarios más bass heavys, en la reproducción de géneros musicales con buena carga en graves o frecuencias bajas como el rock, la electrónica, el hip-hop o el metal, y la posibilidad de encontrar una gran variedad de funciones y características en favor de la tecnología como la cancelación de ruido, la conectividad inalámbrica, los asistentes de voz y más. ¿Estás pensando en adquirir unos auriculares cerrados próximamente? Descubre todo lo que necesitas saber en este nuevo post. ¡Arrancamos!
Los auriculares cerrados son aquellos que tienen la copa sellada y no permiten el paso del ruido del exterior al interior de nuestros oídos, ni al revés, para obtener un aislamiento de forma pasiva durante nuestro tiempo de escucha. Para su fabricación se suelen emplear materiales como el plástico rígido en gamas de entrada, y el aluminio o la madera en gamas altas.
Estos auriculares predominan en el mercado del audio por su carácter versátil y la posibilidad de utilizarlos en diferentes ambientes ruidosos como la calle, el transporte público o la oficina; entornos profesionales como el estudio, y cualquier otro ámbito personal como el hogar.
Si te estás planteando adquirir unos nuevos auriculares cerrados es hora de conocer todas sus ventajas. ¡Toma buena nota!
Aislamiento
Como mencionábamos anteriormente, los auriculares cerrados son los reyes del aislamiento. Si buscas unos casos que no dejen pasar ni un ápice de ruido hacia el interior y el exterior, estos sin duda son los más recomendables. Ahora bien, ¿Qué auriculares cerrados son los que más te convienen por diseño? Se dividen en tres grandes grupos:
1. Auriculares Over-Ear: Los auriculares over-ear o circumaurales cerrados son aquellos cuyas copas recogen toda la cavidad del oído, cubriendo por completo la oreja y repartiendo el peso de la diadema por toda la cabeza. Son, por norma general, los más cómodos de utilizar para sesiones de escucha largas a pesar de ser los menos ligeros.
2. Auriculares On-Ear: También denominados supra-aurales, estos auriculares son los que se apoyan en la oreja pero no la cubren por completo. Su filosofía portátil hace que predomine el diseño cerrado por encima del abierto o el semi-abierto. Son muy sencillos de transportar, plegar y guardar en cualquier bolso o mochila; sin embargo, están poco recomendados para procesos de escucha analíticos.
3. Auriculares In-Ear: Aunque marcas como FiiO están apostando cada vez más por diseños semi-abiertos para su gama de IEM, los auriculares intra-aurales suelen incorporar un diseño de cápsula cerrada con un tubillón que se introduce por completo en el conducto auditivo, logrando un nivel de aislamiento máximo, que unido a su construcción, los hacen ideales para entornos muy ruidosos.
Por último, cabe mencionar que existen más tipologías de auriculares como los de botón o los mini-supra, cada vez menos presentes en el mercado. Si quieres saber más detalles no te pierdas esta guía de tipos de auriculares según su uso.
El perfil de sonido de los auriculares cerrados tiende a ser más "bajista" que el de los auriculares abiertos a causa de su estructura. En el diseño cerrado, el driver "choca" de forma interna con la estructura de la copa y esto produce un mayor impacto sonoro que durante la reproducción se representa con una respuesta en graves más contundente. Esto es especialmente relevante en géneros musicales de "pegada" como la electrónica, el hip-hop, el rock o el metal. No obstante, esto no quiere decir que por definición todos los auriculares cerrados sean necesariamente extremos, pues todo dependerá de la estructura de drivers que empleen para lograr un perfil de sonido u otro, escena más o menos amplia, etc.
Más tecnologías
El carácter portátil de los auriculares cerrados facilita la incorporación de tecnologías y funciones afines a usuarios que están en constante movimiento. Sobre el papel, es más recomendable incorporar conectividad Bluetooth a un auricular de diseño cerrado que a un abierto, siendo el primero más proclive a que se pueda utilizar fuera de casa o en entornos laborales, sin cables y con dispositivos domésticos como el smartphone, la tablet o el PC.
Por otro lado, muchos auriculares cerrados actuales e inalámbricos, ya incorporan tecnologías de cancelación de ruido activa, con el objetivo de aislar por completo al oyente, incluso con diferentes modos de sonido que se adaptan al entorno, combinando su naturaleza pasiva con los últimos avances en ANC.
Características útiles como la compatibilidad con asistentes de voz, el emparejamiento NFC y la personalización a través de aplicaciones móviles, por mencionar algunas, permite una mayor flexibilidad en el uso y disfrute de nuestros auriculares favoritos.
Otra de las preguntas obligatorias a la hora de decantarnos por unos auriculares cerrados, son sus diferencias con los auriculares de diseño abierto. Si bien hemos mencionado cuáles eran sus ventajas, es preciso apuntar que los segundos, los abiertos, nos darán una escena sonora más amplia con un posicionamiento de instrumentos repartido en el espacio para un sonido detallado. También es más probable que encontremos perfiles de sonido con mayor equilibrio, evitando posibles periodos de fatiga auditiva o un impacto indeseado en frecuencias bajas y altas. No obstante y como siempre apuntamos, si tienes la posibilidad de realizar pruebas y obtener asesoramiento experto antes de comprar, tendrás mucho camino adelantado en esto del audio.